lunes, 9 de noviembre de 2009

El color del azar


Dedicada al Tío León, al Tony, a Claudio y especialmente a mi hermano Ángel

7 comentarios:

  1. Otra interesante columna don Marcelo…

    En mi caso personal, también dese hace un tiempo, no tanto como usted, he optado por no creer en la suerte, así como tampoco en un “plan divino” o en una deidad que sea capaz de afectar la vida de otros para mi beneficio particular .

    Personalmente creo que todo es causa y efecto, que la "suerte" no existe y que incluso la “mala o buena suerte” de las cosas que nos pasan en la vida, es sólo una cuestión de interpretación, ya que todo lo que nos sucede tiene implicancias positivas y negativas y es opción de cada quien quedarse con cualquiera de ellas y construir su futuro en base a esa opción, de la que dependerá si lo que viene será positivo o negativo...

    Quizá con esta opción hemos perdido la posibilidad de “culpar” a otros cuando las cosas no se nos dan, pero afortunadamente ganamos eso mismo…

    Creo que es preferible, al menos para mí, el hacernos cargo de nuestro propio destino, de creer que lo que pase en nuestras vidas será el resultado de nuestro aprendizaje y accionar. Siento que el entregar mi “destino” a elementos exógenos me puede hacer caer fácilmente en el conformismo, la “aceptación” de las calamidades y del sufrimiento, en la sumisión o en la tan recurrente victimización (cuyos maléficas consecuencias he constatado en mi entorno más cercano y en carne propia). Y por otra parte, el hacerme cargo de él, implicará que pasará todo lo que yo haga que pase… Prefiero “arriesgarme” a hacerme cargo de mi vida y vivirla con cosecuencia, asumiendo los golpes de ella como parte de mi proceso de crecimiento y como causas y efectos que pueden ser muy positivos a futuro, en la medida en que logre aprender de ellos y seguir avanzando en mi camino…

    Habrá muchas personas, quizá la mayoría, que optarán por creer en la superstición o en la “intervención divina” y en la medida en que eso les sirva para crecer y ser felices y no les haga esclavos de un rito, una cábala, amuleto o alguna institución (léase iglesia, secta o similar), pues muy bien por ellos, aunque no sea el camino que yo elegí (al menos en esta etapa de mi vida, porque otra ventaja de no creer en un “destino” marcado por situaciones foráneas, es que se le puede cambiar a voluntad, a él y a nosotros mismos…).

    Mis saludos afectuosos y mis deseos de paz, amor y felicidad en su vida (si tiene eso ¿para qué quiere la suerte?).

    Rolando
    PS: mis saludos también a su hermano

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  2. Se agradece el comentario don Rolando,muy sabios sus comentarios

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  3. Hola Papa
    Olvidaste citar que se me pasó por la cabeza robarle el cartón!
    Te deseo mucha "suerte", o mejor dicho "causalidad" en tu nuevo proyecto.
    Un abrazo
    tony

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  4. Muchas gracias Tony por la anécdota y sobretodo por los buenos deseos.
    Marcelo

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  5. Hola Papa,
    La verdad yo nunca me he ganado nada, ni en las tapas de yogurt, aunque cuando trabaje en La Serena, me comia un chocolito diario hasta que me salio un "vale otro".
    Bueno en realidad me interesa saber el nombre del puntero del audax. Estamos hablando de la epoca de Juan Machuca? de Spedaletti? del Pollo Newmann? del gran Darci Rocio da Lima "Liminha"? porque yo no me acuerdo de ningun crack del audax.
    Bueno, nos vemos en dos semanas, es de esperar que esta vez no me toque un diablo en el avion...ahora viajo con una diabla (la Saruca)...
    abrazos
    Flaco

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  6. no po si finalmente nunca se convirtió en Crak, pero el más clásico de los de audax fue Juan Carlos Letelier... aunque el puntero era otro

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  7. "Todo lo que tú quieras se logra trabajando", eso fue lo que siempre escuché de mi padre, pero yo añadí, con el paso del tiempo, "trabajando bien en algo que te guste". No creo en el azar, para muchos he tenido "suerte" (buena disposición, nomas, dice mi hermano) Cuando renuncié a mi último trabajo, donde hice literalmente lo que quise hacer,para irme a otro cerca de mi casa, mi jefe me inventó un proyecto para que continuara con ellos, ahora boleteando. En mi nuevo trabajo, me iba a dedicar sólo a la docencia, pero apenas llegué, me ofrecieron la coordinación, tuve que pensarlo, ya que venía de hacer un trabajo de oficina, pero como podía también hacer clases, acepté. Buena disposición, suerte, azar, etc., no lo sé. Para mi es sólo amar lo que se hace, hacerlo bien, ser uno más del equipo e ir por la vida sin esperar nada. Hago lo que me gusta y además me pagan: "Eso es sacarse el gordo".

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